Libertad
Fotografia de Paul Strand |
La libertad, a mis treinta y tantos, se empolva
en viejas camisetas del Che. Es, como dijo
Benedetti, una palabra aguda nada más.
Se escapa en teléfonos móviles, entre
las piernas de una mujer. Huye por trabajos
mal pagados, desaparece cuando todos los días
tenemos que comer.
Un amigo, una hermana. Hipotecas para casas de muñecas.
Libertad es un pájaro de alas rotas.
Dime, niña con naranjas por pechos, dime,
¿qué es la libertad?, dímelo tú, sabes que no existe.
Tú mejor que nadie, tú que eres mujer.
Aparece fugaz cuando ya no hay nada que perder.
Jorge M. Molinero
Comentários
Enviar um comentário